¿Difícil?, sí, pero no imposible.
La vida tiene muchos caminos, y hay que saber cuál elegir. Aunque dos caminos te lleven a un mismo sitio, puede que en el trascurso de tu viaje sufras más en uno que en otro.
Y eso nadie lo sabe, a nadie le dan un manual sobre qué hacer o decir en ciertas situaciones, cómo afrontar los problemas.
Por eso, yo opto por empezar de nuevo, con los mismos objetivos, pero diferentes vías; escojo ser feliz ante la adversidad.